/p>>Objetos decorativos únicos, con alma, para establecimientos que quieran personalizarse. Eso es lo que fabrica la firma Zigurat, y este imponente espejo decorativo, que suma 220 cm de longitud, es buena muestra de ello.

Espejo con pleita de esparto
Se trata de un espejo realizado en fibra de vidrio con acabado cromado, mágicamente «transformado» con la aplicación de un elemento tan natural y sencillo como la pleita de esparto tintada en negro, en la que va engarzado.
«Es un trabajo sencillísimo, ‘low cost’, de diseño, con fuerza visual, y que incluso puede llegar a ser 100% sostenible si se sustituye la fibra de vidrio del espejo», explica José Luis Gómez, responsable y creativo de Zigurat Decoración. «Y por supuesto, adaptable y totalmente personalizable; se puede realizar a medida, en el tamaño y textura que se quiera».
¿Dónde se puede instalar un espejo de estas características? «En cualquier tipo de establecimiento hostelero», comenta José Luis Gómez. «Tanto en interiores como en exteriores. En el vertíbulo del hotel, en el porche, en el spa… en hoteles de diseño y en hoteles urbanos. Y por supuesto en hoteles de costa, de naturaleza o con encanto».
El responsable de Zigurat lo tiene claro: es cuestión de imaginación y adaptarse a las necesidades del cliente, para lograr elementos y proyectos decorativos personalizados y asumibles.
«No hacemos productos», asegura. «Simplemente hacemos realidad las ideas. Y el sector hostelero requiere de diseños singulares y emocionantes, que se alejen de la decoración doméstica habitual».