/p>>Ubicado en la pintoresca y tranquila localidad portuguesa de Caminha, muy cerca de la frontera con España, el hotel Design  & Wine es todo un exponente del diseño tecnosostenible. Un ejemplo de cómo un edificio histórico del siglo XVIII se ha transformado en un sofisticado oasis para los amantes del arte y el vino.

La hermosa fachada de la casa de campo del siglo XVIII que alberga el hotel da paso a un moderno interior contemporáneo,uniendo historia, tecnología y tradición.

La arquitectura y el interiorismo del hotel Design & Wine, obra del reconocido arquitecto Pedro Guimarâes, copropietario del hotel, se funden armónicamente con el hermoso paisaje de los alrededores, la ribera del Miño, a través de su  diseño inteligente y muy cuidado, basado además en rigurosos criterios de sostenibilidad: paneles solares, sistemas eficientes de iluminación, estricta política de reciclaje, consumo reducido de agua y de detergentes…  Pero, además, este cuatro estrellas hace honor a su nombre a través de su apoyo a la cultura y a la gastronomía local.
Cada una de  las 18  habitaciones de este coqueto hotel boutique ha sido creada y personalizada a medida por los interioristas portugueses de  Feedback Studio, y ofrece una temática diferente inspirada en la pintura, el diseño gráfico, el arte callejero o la moda, toda una muestra del compromiso del hotel con las artes.
Todas las habitaciones están equipadas con iPad, minibar, modernas amenities, wifi y un innovador sistema de aromaterapia y coromoterapia para crear una experiencia muy especial.

Uno de los elementos más llamativos y originales del diseño arquitectónico del hotel es el vanguardista edificio anexo que alberga sus cinco suites. La elegante estructura de acero de 18 toneladas de peso gira 35 grados dos veces al día, movida por energía solar, ofreciendo una panorámica cambiante: los huéspedes se van a dormir contemplando  las vistas que ofrece el monte de Santa Tecla  y despiertan con una maravillosa panorámica  del río Miño.

La gastronomía juega un papel clave en Design & Wine. Además del bar, La Enoteca es el espacio donde encontrar y degustar una selección de los mejores vinos portugueses (sobre todo los tintos del Douro y los «verdes» elaborados con las variedades locales Alvarinho y Loureiro) acompañados de aperitivos tradicionales. Y en el restaurante Alto Minho los platos tradicionales se reinterpretan según los parámetros de la cocina moderna.
No hay que olvidar el Whitebox, un espacio para eventos y exposiciones dentro del hotel, diseñado especialmente para exhibiciones temporales de obras de artistas itinerantes.

En definitiva, el hotel Design & Wine, que es miembro de Design Hotels, refleja la belleza natural y la cultura de la región de Camniha a través de su arquitectura sostenible, una ubicación privilegiada y un programa de eventos artísticos y culinarios que estimulan los sentidos. Todo un oasis  relajante tanto para los amantes del arte como del vino.