/p>>El sumiller Iván Martínez Hierro, ganador del conocido concurso La Nariz de Oro de España 2014, recomendó seis grandes vinos durante una ponencia-cata celebrada recientemente en la Feria del Vino y Alimentación Mediterránea de Torremolinos, Málaga.

El vencedor de la edición 2014 de La Nariz de Oro, Iván Martínez Hierro, dirigió una ponencia con formato de cata en la Feria del Vino y Alimentación Mediterránea celebrada en Torremolinos (Málaga).
El sumiller de la vinoteca La Tienda Colmado en Medina del Pomar (Burgos) comenzó la cata con un cava muy especial de la bodega Sumarroca de Barcelona, Núria Claverol 2009, que lleva el nombre de la esposa del fundador de la bodega, Carles Sumarroca, y luce una espectacular botella inspirada en las ánforas griegas. El cava procede de una parcela de xarelo seleccionada por su gran calidad, y sorprendió gratamente a los asistentes.
A continuación Iván Martínez eligió el blanco albariño Balado 2013 de la bodega gallega Zárate, que transmite «una sensación de frescura con una acidez compensada», explicó el sumiller.
La sesión continuó con Delicia de Baco 2010, un elegante vino tinto Rioja de la bodega Señorío de Villarrica procedente de viñedos casi centenarios de la propiedad. Martínez explicó que que «hablar de Rioja es hablar de tradición y de muchos siglos»; si por algo se conoce a los vinos españoles «es por esta Denominación de Origen».

El siguiente vino estrella fue Carmelo Rodero Crianza 2011, un tinto de la D.O. Ribera del Duero que se caracteriza por tener perfil «más profundo, maduro y con leve sabor a regaliz y mora». Para el Nariz de Oro 2014 no se debe discutir entre un Ribera y un Rioja, ya que «se pueden tener los dos» y sería una «pelea absurda».
El último vino seleccionado fue sido el dulce Old Harvest de la bodega Ximénez Spínola, que trabaja sólo con uva Pedro Ximénez y que ha tenido una gran aceptación por parte del público por ser perfecto para cerrar una comida.
Iván Martínez concluyó su cata-ponencia su ponencia haciendo una alabanza a los vinos españoles. «Es alucinante que teniendo estas joyas que perduran el tiempo, se valoren tan poco», señaló, «ya que son vinos únicos en el mundo que surgen de manera «espontánea y hay que aprovechar».
Vea aquí una vídeo entrevista a Iván Martínez Hierro