/p>>No pueden presentarse mejor las Navidades para el chef cordobés: acaba de ser nombrado Embajador del Turismo de Córdoba y triunfa con sus dos restaurantes: Choco, en su ciudad natal, que ostenta una estrella Michelin, y el malagueño KGB, una propuesta informal y divertida inspirada en el mundo del espionaje. Y entre Córdoba y Málaga tiene tiempo a ser solidario…

Kisco García, fotografiado en la Mezquita de Córdoba por Rafael Carmona
Kisco García, fotografiado en la Mezquita de Córdoba por Rafael Carmona

Dentro de los Reconocimientos al Mérito Turístico “Turismo de Córdoba”, el Patronato Provincial de Turismo de la Diputación cordobesa ha nombrado a Kisko García, uno de los chefs más representativos de la nueva cocina andaluza, como Embajador del Turismo de Córdoba.
Los galardones, que se han entregado el 18 de diciembre en el salón de actos de la institución provincial, dentro de la Gala del Turismo de Córdoba 2014, reconocen «el trabajo ejemplar en el sector turístico». La decisión final ha sido tomada un jurado compuesto por asociaciones provinciales de reconocida profesionalidad en el sector.
El chef cordobés se muestra «encantado, orgulloso y emocionado» con este reconocimiento que premia su labor infatigable de refrescar el milenario recetario de su tierra, con una cocina imaginativa basada en los productos y las tradiciones culinarias cordobesas y andaluzas. Una trayectoria que le ha valido una estrella Michelin para Choco, su casa familiar.
KGB, la nueva aventura
Kisko García en la Mezquita de Córdoba
Kisko García ha sido nombrado Embajador del Turismo de Córdoba. Foto: Rafael Carmona

El pasado junio Kisko García daba el salto a Málaga (sin abandonar Choco, por supuesto) para abrir junto con su hermano KGB, un original bar de tapas inspirado en el mundo del espionaje, que también le está dando «muchas satisfacciones». «Estamos muy contentos de cómo está yendo», explica el cocinero. «Es algo muy distinto a lo que había en Málaga, y la gente lo pasa muy bien. Es un lugar perfecto para ver y ser visto».
En KGB (Fresca, 12) se ofrecen tapas del mundo, «desde un tataki a un pato laqueado, pasando por una buena tortilla de patatas». Alta gastronomía a un precio más  accesible, con propuestas que el chef cordobés ya ofrece en su taberna familiar y otras inspiradas en sus viajes por el mundo.
La puesta en escena recrea una atmósfera de espías, entre cámaras y pasaportes que ocultan la cuenta. No falta una una selección de ‘vinos sospechosos’ de dentro y fuera de nuestras fronteras.
Kisko García, un chef con estrella. Foto: Rafael Carmona
Kisko García, un chef con estrella. Foto: Rafael Carmona

Al frente de KGB (las siglas tanto del Kisko García Bar como las de la antigua agencia soviética) está un equipo de confianza bien entrenado en Choco, aunque el chef cordobés se desplaza a Málaga varias veces por semana.
Paralelamente, Kisko García sigue al frente de Choco, ye se muestra especialmente orgulloso de su nuevo menú degustación, donde reinterpreta productos tradicionales como lechazo, gazpacho o salmorejo. Hay dos opciones para degustarlo, con 9 ó 14 platos que se sirven con una estudiada cadencia y puesta en escena «para disfrutar con calma», promete el chef.
Pizza por alimentos
En breve, el 23 de diciembre, el el chef cordobés cambiará pizza por alimentos en el marco de Kilochef, el evento solidario promovido por el Campus de Excelencia Internacional Agroalimentario (ceiA3) y el Banco de Alimentos.
En esta ocasión Kisko García se pondrá al frente de los fogones para cambiar 500 porciones de pizza por alimentos. Para ello el cocinero preparará una pizza gigante en los Patios de la Marquesa de Córdoba.
Así,entregar un litro de aceite de oliva dará derecho a una porción de pizza, al igual que dos kilos de alimentos no perecederos, mientras que una lata de 800 gramos de leche de continuación permitirá consumir cuatro porciones de pizza. Todo un ejemplo de cómo ser solidario no está reñido con el disfrute gastronómico.