Atención a la alimentación que viene: proteínas diferentes e innovadoras como las algas, el pollo cultivado en laboratorio o la carne cultivada premium, que estarán disponibles en la mayoría de lineales en un plazo de dos años, según ha quedado de manifiesto en una nueva edición de Ftalks Editions, organizada por KM Zero Food Innovation Hub.

La firma iWi, especializada en el cultivo de algas para la producción de suplementos funcionales en granjas sostenibles en Texas y Nuevo México, ha sido una de las protagonistas de Ftalks Editions. Su CEO, el español Miguel Calatayud, ha explicado que la compañía utiliza recursos que se desperdician como agua salada, tierra desértica y CO2 y asegura que “el alga nannocloropsis será la próxima gran tendencia alimentaria y en 2022 estará disponible el en mercado a nivel mundial”.

Profesionalhoreca, Plato a base de proteína vegetal de Wicked Foods
Plato a base de proteína vegetal de Wicked Foods

Hay más proyectos innovadores que también están haciendo un notable esfuerzo por democratizar a corto plazo el consumo de nuevas proteínas sostenibles, saludables y atractivas para el consumidor. Es el caso de Orbillion, que trabaja en la creación de carne cultivada premium. También de Wicked Foods, gama pionera de productos de origen vegetal de comidas preparadas, pizzas o alternativas a la carne, impulsada por chefs, o Super Meat & The Chicken, empresa tecnológica alimentaria con sede en Tel Aviv, que trabaja para suministrar carne de pollo de alta calidad cultivada directamente a partir de células de pollo y que ha abierto el primer restaurante del mundo que la incorpora en su menú.

Profesionalhoreca, Receta a base de pollo cultivado en laboratorio de la israelí Super Meat
Receta a base de pollo cultivado en laboratorio de la israelí Super Meat

El CEO de esta última, Ido Savir explica que “no me gusta hablar de proteínas alternativas, lo que estamos llevando a cabo es una producción alternativa de proteínas. Cambiamos la forma de producirlas”. Por su parte Etske Bjl, profesora de la Universidad Wageningen, conocida como el «food valley«, ha presentado un proyecto financiado con 2,5 millones de euros para crear leche sin origen animal, pero con la misma cantidad de proteínas.

Todos estos emprendedores asegurar que la disponibilidad de estos innovadores productos «será pronto una realidad» y coinciden también en que están cambiando la forma de producir proteínas con un impacto positivo para el planeta.

La disponibilidad de estos innovadores productos «será pronto una realidad», aseguran sus promotores, que están cambiando la forma de producir proteínas con un impacto positivo para el planeta

Una carrera de fondo que responde a una necesidad urgente. Según la FAO, en 30 años deberá duplicarse la producción actual de proteína para abastecer a 10.000 millones de personas. “Tenemos la oportunidad de ampliar la variedad de productos que ofrecemos al mercado, basándonos en fuentes de proteínas diversas, para poder garantizar la mejor experiencia y sabor al consumidor con impacto positivo en la salud del planeta y las personas”, afirma la directora de KM Zero Hub, Beatriz Jacoste. 

Abastecer a la población mundial de manera sostenible

Esta edición de Ftalks Editions ha contado también con fondos de inversión en proteína alternativa, Big Idea Ventures y New Crop Capital, e impulsores de proyectos ‘plant-based’ y de agricultura celular como MeliBio, Shiok Meats, Beyond Meat o Heura. Todos coinciden en la importancia de impulsar nuevas proteínas sostenibles, altamente nutritivas, saludables y deliciosas para alimentar a la población creciente.

También la industria también se está adaptando para desarrollar una nueva generación de proteínas. Así lo ha expresado la consejera ejecutiva de Dacsa Group, Araceli Císcar, subrayando que “de acuerdo con las tendencias de mercado, las alternativas vegetales crecen anualmente a un ritmo vertiginoso y han dejado de ser una moda para convertirse en una realidad. Desde nuestra planta en Zamora desarrollamos alternativas vegetales a la carne., y con nuestro proyecto Pésol Pea queremos ofrecer una solución clean label, de origen vegetal y no GMO».