Snake Bar, el último proyecto de GLH Singular Restaurants en Madrid, combina coctelería, gastronomía y un interiorismo retro con música en directo de los 70, 80 y 90. Una nueva experiencia gastronómica y de ocio en Marqués de la Ensenada.
GLH Singular Restaurants da un paso más en su apuesta por la creatividad y la experiencia con la apertura de Snake Bar, un espacio que fusiona coctelería de autor, gastronomía pensada para compartir y la música que marcó las décadas de los 70, 80 y 90. Situado en el número 16 de la madrileña Marqués de la Ensenada, el local espera convertirse en uno de los nuevos referentes del ocio madrileño.

El interiorismo del Snake Bar refuerza su espíritu canalla y cultural. Con guiños visuales a la cultura musical de los 70, 80 y 90, iluminación cálida y una cuidada selección de elementos decorativos, el espacio está diseñado para evolucionar desde la tarde hasta la noche.
La música juega un papel esencial, recorriendo estilos que han marcado los últimos 50 años, y los miércoles se ofrecen sesiones en vivo. El resultado es un lugar donde comer, beber y escuchar música en una experiencia integral. Además, Snake Bar esconde un reservado clandestino…

Cócteles creativos
La propuesta líquida, liderada por el director de barra y coctelería Carlos Moreno, rinde homenaje a clásicos musicales a través de cócteles creativos que conectan con la memoria emocional de varias generaciones. Desde combinaciones frescas y frutales como The Time of My Life, hasta reinterpretaciones con carácter como el Negroni Snake con chocolate, plátano y palo cortado, la carta busca sorprender tanto a los amantes de la coctelería clásica como a quienes optan por opciones sin alcohol.

Platos para compartir
Por su parte, la propuesta gastronómica de Snake Bar apuesta por platos divertidos y sabrosos para compartir y alargar la noche una carta desenfadada, pero con personalidad, donde destaca su plato insignia, el pollo gallego de corral frito acompañado de guarniciones caseras.
Hay opciones más sofisticadas como la ostra francesa con aliño de Bloody Mary servida en chupito; el steak tartar sobre pan de chapata coronado con gilda; el torrezno crujiente con guacamole; la pizza muy fina de salami picante o la smash cheese burger; todo pensado para el disfrute sin complicaciones.
Para cerrar la experiencia, postres como el gofre recién hecho con chocolate caliente y helado de vainilla o la cheesecake cremosa.
En definitiva Snake Bar, está pensando para comer, beber y disfrutar de la música.

GLH Singular Restaurants
Con esta apertura, GLH Singular Restaurants refuerza su apuesta conceptos con identidad propia, capaces de ofrecer más que una cena o una copa: una experiencia inmersiva con detalles muy cuidados, desde la carta hasta la ambientación.
GLH Singular Restaurants es la unión dos referentes del sector: Grupo Larrumba y Grupo Carbón, destaca por su capacidad para generar conceptos únicos que conectan con el público.
Actualmente gestiona 26 espacios como Pabblo, Carbón, Fanático, Habanera, Perrachica, Marieta, Los Castizos o el sevillano Río Grande, que reciben a más de dos millones de clientes al año.
Con una plantilla de más de mil empleados y una facturación anual superior a los 60 millones de euros, la compañía se consolida como como un referente en la creación de experiencias únicas que combinan gastronomía, ocio y emoción a nivel nacional.