/p>>¿Quién no recuerda los conos de papel de los churros de la infancia, manchado de aceite y azúcar? Décadas después el cono vuelve a la hostelería como un elemento renovado, pujante y lleno de vida: vive una segunda juventud y ofrece enormes posibilidades gracias a sus posibilidades de personalización y variedad de soportes.

Puesto de moda especialmente en Barcelona como recipiente de tacos de jamón que se cogen pinchando con una brocheta, el cono recobra protagonismo y se viste de urbano copiando la imagen de los periódicos de más allá de nuestras fronteras, como The New York Times o The Times de Londres. O de exótico, a través del bambú. También los hay en madera, cristal o en cartón.
Desde la firma InnoGourmet, distribuidora de productos innovadores para hostelería, lo consideran «uno de los grandes animadores” de esta próxima primavera en el sector. “Porque el cono es original, divertido y desenfadado, y porque los establecimientos ya no sólo ofrecen una tapa más sino, sino un motivo de conversación mientras se pinchan unos calamares, una tempura, unas patatas fritas, jamón o lo que se nos ocurra. Tenemos conos en distintos tamaños y materiales, partiendo del papel y llegando hasta el vidrio más refinado”, explican.

Restaurantes, bodegas y fabricantes de jamones son los colectivos más buscan en InnoGourmet la personalización de este producto para añadir al toque desenfadado a una imagen de marca. “Trabajamos en toda la península con impresión a una, dos tintas o con cuatricomía y el resultado es extraordinario», explican. «Un cono en la calle con el logotipo grabado de una empresa mientras la gente disfruta de un tiempo de ocio es una magnífica publicidad, y las marcas se están percatando de ello”.
Además de los propios conos, InnoGourmet ofrece también una variedad de soportes de alta calidad con diferentes capacidades en metacrilato (con bandejas específicas para su pase por primera vez) o inoxidable. E, incluso, piedra.
De esta manera, esta primavera podremos encontrar los conos tanto en las recepciones de bodas como en eventos personalizados de todo tipo, en exteriores o en la barra de la tapería de moda. «Es un clásico que se ha resistido a morir», aseguran en InnoGourmet. Y con gran resultado.