Siete de cada diez consumidores pueden permitirse comer fuera a pesar del contexto de inflación, pandemia y guerra; el 85% no tiene problemas en comprar básicos de alimentación y el 70% puede hacer frente a las facturas, revela un informe de Kantar.

Siete de cada diez consumidores pueden permitirse seguir saliendo a comer fuera, según el informe Global Issues Barometer de Kantar Insights. Esta cifra está alineada con el porcentaje de españoles que son capaces de hacer frente a las facturas, mientras que el 85% puede comprar básicos de alimentación en un momento de salida de pandemia, entrada de inflación y una guerra de por medio.

ProfesionalHoreca, comensales en un restaurante

Sin embargo este barómetro, que analiza 18 países de todo el mundo, muestra que los consumidores ven con cautela (o directamente, imposibles de afrontar) gastos grandes que impliquen un medio o largo plazo, como puede ser, por ejemplo, comprar un coche nuevo. Un 55% afirma que no podría asumir la compra de un vehículo y un 31%, aunque, no se quiere arriesgar. Este pensamiento de prudencia también afectaría a otros productos considerados «extra», como la ropa.

De hecho, el informe concluye que los españoles no ven ahora más allá del corto plazo. De hecho sus principales expectativas, más allá de que concluya la guerra, están en irse de vacaciones y volver a celebrar eventos de vida (bodas y otras celebraciones), actos pospuestos tras la pandemia.

No obstante, desde Kantar advierten que «con el paso de los meses irán cambiando hábitos de consumo, más ajustados al momento actual». En particular, 4 de cada 10 españoles realizarán cambios en su economía doméstica para reducir gastos; mientras que una tercera parte tiene pensado modificar comportamientos que supongan un menor gasto, como por ejemplo, reducir la movilidad en el coche.

Los españoles no ven ahora más allá del corto plazo: sus principales expectativas, más allá de que concluya la guerra, están en irse de vacaciones y volver a celebrar eventos de vida (bodas y otras celebraciones), actos pospuestos tras la pandemia.

El informe también refleja que uno de cada cuatro pondrá límites a ese dinero que mes a mes iban ahorrando, que ha sido uno de los comportamientos más recurrentes durante la pandemia. Según datos del INE, la tasa de ahorro en 2020, de hecho, fue de récord y alcanzó el 15% de la renta disponible.

El Barómetro subraya cómo la anterior preocupación por la pandemia se está disipando, pero, en su lugar, se está desplazando gradualmente a los precios. Solo un 38% de españoles aún se muestra alerta con el Covid-19, mientras que ya la mitad lo está por la economía.

En concreto, un 68% de consumidores afirma que percibe una subida de los precios de manera muy aguda, una hipersensibilidad mayor que en otras economías europeas como Alemania, donde un 59% tiene ese mismo presentimiento con el aumento del coste de la vida; o bien Francia y Reino Unido, con el 49% y el 48%, respectivamente.