Pascual anuncia que acaba con el azúcar en el tueste de sus cafés Mocay, eliminando así el café torrefacto. La marca cafetera sustituirá antes de 2023 el proceso de torrefactado por el tueste natural en toda su gama de cafés.

Profesionalhoreca, café Mocay

Mocay, la marca de cafés de Pascual, se ha marcado el objetivo de eliminar el torrefacto en sus mezclas de café para finales del año 2022 y convertirse, antes de 2023, en el primer gran fabricante que elimina este proceso en el fabricado de todo su catálogo.

La marca, que sustituirá el torrefactado por un tueste italiano, responde así a las demandas del consumidor, que prefiere productos más naturales. El 25% de las ventas de Mocay incorporan una media del 15% de café torrefacto en sus mezclas, una cifra que reducirá durante 2021 y 2022 hasta eliminarse por completo antes de que comience 2023.

El torrefactado del café es un proceso arraigado en España desde hace décadas. Consiste en la adición de azúcar (hasta un 15% del peso) en el momento del tueste del café, de manera que el azúcar se convierte en caramelo con la aplicación del calor. Este caramelo envuelve e impregna el grano de café, dándole su característico color negro.

Este proceso no aporta nada a la calidad del producto. En primer lugar, el torrefactado da un sabor amargo que altera el sabor puro del café de calidad superior y disimula el sabor de las mezclas de una calidad inferior. Por otra parte, además de incorporar azúcar, también tiene otras implicaciones logísticas, ya que es más duro, abrasivo y pegajoso, por lo que puede influir negativamente en la durabilidad y funcionamiento de la maquinaria que se utiliza en la preparación del café.

“Es cierto que el consumo de mezclas de café torrefacto está generalizado en algunas zonas de España, pero la tendencia del mercado nos dice que la hostelería apuesta por el tueste natural y que el consumidor, cuando es informado de lo que significa torrefactar, se cambia rápidamente al natural”, explica Juan Carlos Rey, director de la Unidad de Negocio de Café de Pascual.

El consumidor tiende hacia lo natural, algo que se está notando ya en el negocio: “En 2021 más de un 11% de nuestros clientes con torrefacto se han pasado ya a natural, teniendo como resultado un incremento de ventas versus 2019, cosa que no se produce en los clientes que mantienen el torrefacto… Por esto, en Mocay estamos comprometidos con acelerar esta transformación y estamos convencidos de que, con la eliminación del torrefacto, los clientes de Mocay van a aumentar sus ventas de café de manera significativa”.

De hecho, el informe anual de 2020 sobre alimentación en España de Mercasa advierte sobre una evolución muy diferente del consumo de café natural y mezcla con café torrefacto. En el período de 2015 a 2019, el consumo de café natural per cápita aumentó un 16,1%, mientras que el consumo de café mezcla disminuyó un 14,3% “Pensamos que esta tendencia no va a hacer más que aumentar en los próximos años, más aún con un consumidor post Covid que busca productos más naturales”, afirma Rey.

Mitos del café torrefacto

Frente a la afirmación de que el torrefacto aporta mayor potencia al café, expertos de Mocay aseguran que el proceso de torrefactado no afecta al cuerpo ni al efecto de la cafeína. Es un falso mito, dicen, “debido al hecho de que el torrefacto oscurece el color del café, dando sensación de mayor potencia frente a un café más claro”.

Además, aseguran que el torrefactado tampoco afecta a la cantidad de crema que se produce en la elaboración del café. “Solo produce más sólidos solubles en la infusión, pero no aporta más a la creación de crema”.