¿Cómo se viajará en 2030? ¿Y por qué? Un informe de Amadeus y la consultora especializada en tendencias de consumo The Future Foundation define seis tribus viajeras que emergerán en la próxima década y influirán significativamente en todo lo relacionado con la industria del viaje, y avanza los cambios que se avecinan.

El estudio identifica seis tribus viajeras emergentes
El estudio identifica seis tribus viajeras emergentes

Se calcula que en 2030 más de 1.800 millones de personas viajarán anualmente al extranjero, pero sus motivaciones y hábitos serán radicalmente diferentes de los de hoy en día. Unos vivirán sus experiencias de viaje para compartirlas en las redes sociales; otros demandarán la máxima comodidad y no tener que organizar nada; otros elegirán el lujo y la exclusividad…
El informe Future Traveller Tribes 2030: los viajeros del mañana identifica cuáles serán los perfiles o tribus de viajeros que emergerán en los próximos quince años, priorizando el enfoque psicográfico frente a criterios sociodemográficos. Así, revela seis perfiles diferenciados de viajeros:
1. Buscadores de capital social: estructurarán sus vacaciones teniendo en cuenta, casi exclusivamente, sus contactos en la red, para apoyarse en sus opiniones y recomendaciones y justificar sus decisiones, así como en las posibilidades que ofrezca de incrementar y enriquecer su capital social. Esto dará pie a un mercado totalmente nuevo de viajes concebidos de manera específica a incrementar la relevancia on-line, plagados a propósito de oportunidades para intercambiar experiencias en las redes sociales.
2. Los puristas culturales considerarán las vacaciones como la oportunidad de zambullirse en una cultura extranjera (aunque ello conlleve ciertas incomodidades) y el disfrute de sus viajes dependerá de la autenticidad de la experiencia.

Los trotamundos comprometidos planificarán sus viajes de acuerdo a criterios éticos, como la reducción de la huella medioambiental o la contribución a la mejora de las vidas de otras personas

3. Los trotamundos comprometidos planificarán sus viajes de acuerdo a criterios éticos, como la reducción de la huella medioambiental o la contribución a la mejora de las vidas de otras personas. Con frecuencia evaluarán cuál podrá ser el impacto del dinero destinado a un viaje en un entorno e improvisarán o incorporarán algún elemento relacionado con el voluntariado, el desarrollo social o la sostenibilidad medioambiental a sus itinerarios.
4. Los amantes de la comodidad preferirán un paquete de productos y servicios para evitar la gestión de diferentes aspectos del viaje. Para esta tribu, las vacaciones constituyen un momento excepcional en el que mimarse, con la confianza de que su seguridad y disfrute están garantizados.
5. Los viajeros por obligación orientarán sus viajes a lograr un objetivo concreto. Ya sean de negocios o de ocio, sufrirán limitaciones de tiempo y de presupuesto; y demandarán una tecnología (basada en algoritmos avanzados) capaz de eliminar o resolver las incidencias de los viajes, como cancelaciones o cambios de vuelo.
6. Los cazadores del lujo se interesarán exclusivamente por los viajes de lujo en su sentido más extremo. El viaje es una recompensa extraordinaria, una experiencia que es imprescindible para compensar el sacrificio de tiempo y esfuerzo que exige su trabajo y su vida cotidiana.
Personalización, experiencia y ética
Alex Luzarraga, vicepresidente de Corporate Strategy en Amadeus, explica que «si volvemos la vista 15 años atrás, es difícil subestimar lo lejos que ha llegado la industria del viaje en términos de innovación, coste y opciones para los viajeros. Y a pesar de ello, cuando hoy nos planteamos el futuro dentro de 15 años, en 2030, está claro que el cambio no hará sino que acelerarse».

A. Luzurraga, de Amadeus: «hay una clara tendencia que se adivina en la industria turística: la mayor personalización de servicios en todas las etapas del viaje, sin precedentes hasta la fecha»

«Con esto en mente, entender las tribus viajeras emergentes será vital para proveedores, distribuidores de productos turísticos y usuarios en los próximos años, con el fin de asegurar que se adoptan ahora las decisiones de inversión adecuadas para responder a una clara tendencia de la industria: la mayor personalización de servicios en todas las etapas del viaje, sin precedentes hasta la fecha».
Por su parte Nick Chiarelli, director de The Future Foundation, señala que «el estudio muestra que en 2030 no sólo cambiará el tipo de experiencia que demanda los viajeros en 2015, sino que la forma en la que compran y adquieren compromisos con la industria también se verá alterada. En los 15 próximos años el deseo de compartir las experiencias de viaje estará muy arraigado y, en consecuencia, también aumentará la repercusión del intercambio de tendencias de inspiración y compra. A medida que los consumidores de los mercados desarrollados se adentran en una era postmaterialista, la experiencia —antes que nada— y, en segundo lugar, la ética —tanto a nivel medioambiental como social—, influirán de forma significativa en las decisiones y los hábitos de viaje de las personas».
La siguiente infografía resume las seis nuevas personalidades de viajeros en 2030:
Infografía del estudio de Amadeus