El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha declarado nulo el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat) que frenaba la construcción de nuevos hoteles en Barcelona. Sin embargo, la sentencia no es firme y el Ayuntamiento puede recurrir el fallo al Supremo.

El edificio del Iberostar Paseo de Gracia, primer hotel de Iberostar en Barcelona

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha anulado íntegramente el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat) de Barcelona, una de las principales medidas del gobierno de Ada Colau para limitar el impacto del turismo en la ciudad, alegando «la inexistencia de evaluación económica y financiera de las actuaciones a desarrollar en ejecución del planteamiento».

El Peuat ha supuesto la restricción de la apertura de nuevos hoteles, apartamentos turísticos y otros establecimientos de este tipo en Barcelona, como albergues y residencias de estudiantes, así como de las obras de rehabilitación de los ya existentes: en casi de ejecutar obras mayores que afecten a su estructura, los establecimientos hoteleros deben reducir un 20 % sus plazas.

Esta normativa ha sido muy criticada por el sector desde su aprobación en 2017, por considerar que restringe la apertura de negocios. Además, los hoteleros han remarcado la necesidad de remodelar planta hotelera de la ciudad para evitar que quede obsoleta y no afecte a su capacidad para atraer turismo de calidad.

El Gremi d’Hotels de Barcelona ha celebrado la decisión del TSJC y considera que el fallo marca el replanteamiento» del actual Peuat por parte del Gobierno municipal. La anulación íntegra del Peuat abre la posibilidad de que se presenten nuevos proyectos de establecimientos turísticos turísticos.

El Ayuntamiento de Barcelona defiende por su parte que su Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos «sigue vigente y tiene plena eficacia jurídica. En concreto la teniente de alcalde Janet Sanz ha recordado que la sentencia no es firme, señalando que de los tres jueces que firman la sentencia uno ha emitido un voto particular que iría en la línea de lo defendido por el consistorio. Por tanto, dice Sanz, «no se van a dar nuevas licencias hoteleras en el centro» de la ciudad, aunque los hoteles «podrán seguir construyendo en la zona permitida» por el plan.

El Ayuntamiento barcelonés trabajará a partir de ahora en analizar a fondo la sentencia y se reserva la opción de presentar un recurso de casación, defendiendo que hay zonas de la ciudad en las que no se necesitan más hoteles, sino más habitantes.