Una vez pasado el fuerte impacto de la pandemia, el delivery y el take–away concentran el 36% del gasto de los españoles en restauración, 15 puntos más que en 2019. Las ventas de comida a domicilio crecen un 68% en el primer semestre en comparación con los dos años anteriores, según The NPD Group.
El 36% del gasto realizado por los españoles durante el primer semestre del año en el sector de foodservice (que abarca la restauración comercial y otros canales como el vending, las tiendas de conveniencia o las cantinas de empresa) se ha destibado a ocasiones de consumo fuera del establecimiento (delivery, takeaway o drive-thru), lo que supone 15 puntos más que en el primer semestre de 2019, según datos de The NPD Group.
Tras el fuerte impacto de la pandemia, el mercado de foodservice mantiene la mejora gradual que inició en Semana Santa, y ya en junio lograba recuperar el 80% del negocio generado el mismo mes de 2019, apoyado por el fin del estado de alarma, el avance de la vacunación y la llegada del verano.
En el primer semestre, el conjunto del sector elevó sus ventas un 25% respecto al mismo periodo de 2020, pero aún está un 31% por debajo de la facturación registrada en la primera mitad de 2019, debido a que los primeros meses de 2021 estuvieron todavía muy afectados por las restricciones.
Nuevo panorama en la restauración: por primera vez en España los locales sin servicio a mesa han superado en cuota de mercado a los establecimientos con servicio a mesa
“Todos los canales del sector se han beneficiado de esta recuperación, si bien todo lo vivido en 2020 nos ha dejado un nuevo panorama en la restauración: por primera vez en España los locales sin servicio a mesa (Quick Service Restaurants – QSR) han superado en cuota de mercado, con un 44%, a los establecimientos con servicio a mesa (Full Service Restaurants – FSR), que representan el 38,5% del mercado al cierre del primer semestre”, explica Edurne Uranga, directora de Foodservice de NPD en España.
En este nuevo panorama, las opciones de consumo fuera del establecimiento han conseguido consolidarse y hacerse un hueco en la rutina de los españoles, aunque con diferente dimensión según el segmento. Así, para el canal QSR la oferta fuera del local se ha convertido en una opción “imprescindible” para el consumidor, que dedica el 15,7% de su gasto en este canal a la comida a domicilio (frente al 8,2% en el primer semestre de 2019) y el 22,2% a la comida para llevar (frente al 12,3% de 2019).
Para los restaurantes con servicio a mesa, el consumo en el establecimiento sigue representando más del 83% del gasto, pero las opciones a domicilio y para llevar también han avanzado: el delivery concentra un 5,2% del gasto en el canal (frente al 0,8% de 2019) y el takeaway y drive thru, un 11,5% (frente al 3,7% de 2019).
Los agregadores incrementan su facturación más de un 102%
Durante el primer semestre del año las ventas del delivery mantuvieron un fuerte crecimiento del 68% respecto al mismo periodo de 2019, un desarrollo en el que han desempeñado un papel destacado los agregadores digitales, como Just Eat, Glovo o Uber Eats. Estos han logrado incrementar su facturación más de un 102% a lo largo de los dos últimos años y ya concentran más de la tercera parte del gasto que hacen los españoles en pedidos a domicilio.
“De la mano de los agregadores digitales, el delivery ha pasado de ser una ocasión a ser un canal que cubre un mayor rango de momentos de consumo y ofrece una más amplia oferta de recetas”, subraya Edurne Uranga.
Mayor variedad de productos disponibles a domicilio
Según los datos de The NPD Group, seis de cada diez pedidos directos al establecimiento (a través de la web o del teléfono) son para cenar, mientras que cuando se encargan a través de un tercero (agregador digital) uno de cada cuatro pedidos se realiza para un momento de snacking.
Además, el consumidor puede encontrar hoy una mayor variedad de productos disponible para entregar a domicilio. En las opciones en las que directamente se contacta con el local (vía teléfono o web), casi seis de cada diez pedidos incluyen pizza o hamburguesa, mientras que cuando se realiza el pedido a través de un agregador digital, hay cierta preferencia por pedir otro tipo de menús y en menos del 50% de las ocasiones se incluye alguno de esos productos ‘estrella’.
“Todo este desarrollo digital no solo ha impactado en términos de estructura del mercado y cuota de los diferentes servicios, sino que también está afectando a la imagen que el consumidor tiene del establecimiento. Hoy, cuatro de cada diez consumidores consideran que un restaurante sin delivery digital no está actualizado y es anticuado«, señala la directora de Foodservice de NPD.
“Estas opciones digitales se han convertido en un canal más de contacto con el cliente, pero hay que entenderlo y adaptarse a las demandas actuales del consumidor, porque estos dos últimos años han cambiado completamente las reglas de juego y el panorama del delivery en España”, concluye Edurne Uranga.