Mejorar los procesos para aumentar la rentabilidad es una de las principales preocupaciones de los hosteleros. Para dar respuesta a esta necesidad, Risso ha lanzado el sistema Burger Experience, que maximiza la rentabilidad y los procesos culinarios para lograr siempre la hamburguesa perfecta.

Burger Experience, de Risso, es un sistema muy sencillo y práctico formado por cuatro pilares: operatividad, rentabilidad, variedad y calidad y experiencia de cliente, con el que los hosteleros pueden obtener hasta un 75% de rentabilidad por menú.

Se pudo comprobar en esta edición de la feria HIP de la mano de Eva Pagès, chef técnica de Risso, y Jo Carron, chef asesor de Vandemoortele, que, además de cocinar para todo el equipo, para comerciales y para los operadores, utilizaron este novedoso sistema para servir 880 raciones de hamburguesas entre todos los asistentes que se acercaron al stand de Risso.

Sea como sea la hamburguesa que quiera el cliente, con el sistema Burger Experience de Risso se puede obtener fácilmente en tan solo 5 minutos siguiendo unos pasos básicos:

  • El fuego: Hay que sella rla carne con fuego fuerte al inicio para lograr la reacción Maillard, una especie de caramelización que hace que la carne quede dorada y crujiente por fuera y jugosa y tierna por dentro
    Un truco: antes de sellarla en la plancha, untar la carne o similar con la grasa semilíquida Evolution Risso.
    Acabar a fuego medio según el grosor de la carne y el punto al que se quiera la carne
  • La carne: El peso ideal para la hamburguesas es 150-200 g. No ha de ser ni muy fina ni muy gruesa. Hacer tres minutos por lado. Se recomieda utilizar una espátula para manipular la carne, sin presionarla, para que conserve todos sus jugos y propiedades
  • Los toppings o complementos: Los clásicos no fallan: lechuga, tomate, queso, beicon, cebolla, huevo… Para los más atrevidos, la creatividad no tiene límites: foie, sobrasada, jamón ibérico, jalapeños… Lo importante: utilizar siempre ingredientes de calidad
  • La salsa es protagonista, ya que define el sabor final. Risso ofrece diferentes salsas a escoger, todas con mucho carácter, que se pueden combinar entre ellas para encontrar sabores únicos
  • El montaje: Se debe añadir la salsa en la parte interna de los panes para fijar la carne y los toppings. Así se aísla el pan del tomate y los vegetales que añadiremos luego.
    Importante: poner el queso sobre la hamburguesa antes de sacarla para que se funda, y atempera los ingredientes para no enfriar la carne.
  • La guarnición: para freír las patatas, los aceites Risso rinden el doble que un aceite de girasol.

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