El valor del mercado español de catering superó los 3.800 millones de euros en 2019, un 3,5% más que en el año anterior. Las cosas variarán, sin embargo, este año por la incidencia del Covid-19: se espera una caída de ventas del 30%, según las previsiones de DBK.

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El catering de alta gama es el peor parado: este año va a caer en torno al 45%, según DBK

Las empresas de catering generaron unos ingresos de 3.805 millones de euros en 2019, lo que supuso un 3,5% más que en el ejercicio anterior, en un escenario de buen comportamiento de la actividad de los principales sectores clientes y de creciente tendencia hacia la subcontratación del servicio, revela el Observatorio Sectorial DBK de Informa.

Sun embargo, en 2020 los ingresos y la rentabilidad de las empresas del sector registrarán una fuerte caída como consecuencia del impacto de la crisis del coronavirus. Durante los meses de confinamiento se han cerrado centros de enseñanza, empresas y otras instalaciones; se ha reducido la demanda por parte del sector sanitario; se han cancelado eventos y han caído bruscamente los desplazamientos aéreos y por ferrocarril.

Previsiones a la baja

Por todo ello, los analistas de DBK prevén un fuerte descenso de los ingresos en 2020, con caídas en todos los segmentos de actividad:

  • La facturación sectorial se reducirá en torno a un 30% en el ejercicio 2020, situándose en 2.660 millones de euros
  • El segmento de colectividades disminuirá previsiblemente hasta los 2.350 millones de euros, lo que supone un descenso del 27%. 
  • Los subsegmentos de enseñanza y empresas son los que notarán en mayor medida los efectos negativos de la crisis, dada la situación de cierre de los centros desde el inicio de la crisis y la incertidumbre existente de cara a su situación en los próximos meses. Por su parte, el segmento sanitario también está viéndose penalizado por la crisis, si bien experimentará una caída más moderada en el conjunto del ejercicio. 
  • El catering de gama alta mostrará un descenso aún mayor, con una caída de en torno al 45%, cerrando 2020 con una cifra de unos 155 millones de euros, en un contexto en el que la celebración de determinados eventos continuará previsiblemente muy limitada. 
  • Por su parte, la actividad de catering aéreo está marcada por el brusco descenso del número de pasajeros, lo que se traducirá en el conjunto del ejercicio en un retroceso de los ingresos cercano al 50%. Así, el volumen de negocio previsto para el cierre del año se sitúa en unos 130 millones de euros. 

En 2019 operaban en el sector unas 985 empresas, que emplean 82.000 trabajadores. Ambas cifras han aumentado ligeramente en los últimos años a pesar de las operaciones de compra realizadas entre empresas del sector. La estructura de la oferta se caracteriza por la existencia de un alto número de operadores de pequeña y mediana dimensión, que coexisten con un reducido número de grandes empresas. Las cinco primeras empresas del sector reunieron en 2019 una participación conjunta del 41,3% de la facturación sectorial, porcentaje que se sitúa en el 57% al considerar a los diez primeros operadores.