Mahou San Miguel lanza su sidra La Prohibida, que propone una alternativa adulta en el mercado de bebidas y se dirige a quienes quieren probar cosas nuevas.

Las sidras de nueva generación, también llamadas «ciders«, son una categoría de bebidas al alza. En este contexto Mahou San Miguel lanza La Prohibida, que se presenta como una cider adulta «que ha nacido para desafiar lo convencional«.

Se trata de una sidra elaborada a través de la fermentación natural de manzanas rojas y verdes en su punto óptimo de maduración. Su zumo se fermenta con levadura seleccionada para conseguir el grado alcohólico, los aromas y el punto justo de carbónico.

El resultado es una cider de carácter refrescante, ligera acidez y final dulce, con un intenso color dorado, sin gluten y baja graduación (4,5% vol. alc.). Una alternativa de bebida para adultos que se dirige a quienes buscan algo nuevo.

Cada uno es libre de tomar La Prohibida como quiera. Se puede servir en vaso, con uno o dos cubitos de hielo, y añadiendo una ramita de romero, para complementar sus sabores afrutados e incrementar las sensaciones aromáticas balsámicas y frescas. En vez de romero, también se puede añadir un toque especiado de canela en rama, que combina perfectamente con la acidez de la manzana. Y por último, siempre se puede beber bien fría directamente de la botella.

“La Prohibida es diferente a lo que conocíamos hasta ahora en el mercado de bebidas”, señala César Hernández, director general de Marketing de Mahou San Miguel. “Creemos firmemente que las marcas tienen la capacidad de aportar y promover cambios positivos en la sociedad y ahora es más necesario que nunca. De hecho es lo que nos piden los consumidores a las marcas en este momento. En el caso de La Prohibida, ha llegado para invitarnos e inspirarnos a vivir plenamente, disfrutando de aquello que de verdad nos mueve”, ha añadido.

Esta cider, que ya se ofrece en los canales de hostelería y alimentación en botella de 35 cl y latas de 33 cl, es también perfecta como aperitivo o para acompañar comidas: va muy bien con quesos potentes y frutos secos, y es un acompañante perfecto de pescados blancos a la plancha, y estofados de carnes blancas y cocina asiática agridulce. También puede acompañar postres, como una tarta de hojaldre con manzana.