El ritmo en la recuperación de los viajes y residencias temporales de trabajo en España está marcado por estancias de más de dos meses, una mayor anticipación en la reserva y la elevada actividad de las grandes empresas.

El 80% de los viajes de trabajo con una residencia temporal duran de media 64 días y son realizados a destinos nacionales. El trabajador viaja solo, y son las grandes empresas (de más de mil trabajadores) las que más viajes realizan, principalmente de cuatro grandes sectores: servicios, industria, gran consumo y energía. Son datos del estudio ‘Viajes de trabajo en tiempos de pandemia’, elaborado por Apartool, herramienta digital española de alojamiento temporal corporativo, para Gebta en España.

ProfesionalHoreca, ejecutivos de viaje de negocios
La pandemia ha hecho que las empresas planifiquen y gestionen mejor los viajes de negocio, buscando la rentabilidad

Según el informe, los viajes de negocios y residencias temporales corporativas comenzaron a recuperarse en septiembre de 2020 y consiguieron mantener esta trayectoria durante los 12 meses siguientes, prolongándose hasta finales de 2021.

El estudio también refleja una tendencia en las empresas a alargar la permanencia en destino. De hecho, la estancia media registrada es de 63,7 días y la mínima es de 21 noches.

Además, se observa una tendencia hacia la mayor previsión y gestión por parte de las empresas, como se deduce del ·booking window» de 24 días, es decir, el tiempo medio que transcurre desde la fecha de su petición hasta la entrada en el apartamento. Con el fin de garantizar la seguridad, las empresas planifican con mayor antelación las estancias de sus ejecutivos.

Según Marcel Forns, director general de Gebta «el viaje debe estar muy bien planificado para lograr su propósito. Hay que organizar el máximo número de reuniones posible dentro de un mismo viaje, para procurar incrementar la productividad de cada desplazamiento. El contexto actual permite un cambio de paradigma que las empresas deberían tomarse muy en serio: la pandemia, a fin de cuentas, es una oportunidad de oro para establecer un equilibrio entre el ahorro de costes y el compromiso con el planeta».

El 59% de las residencias temporales corresponden a grandes empresas (más de mil personas), si bien las medianas empresas (más de 500 personas) cuentan con un volumen que refleja una clara tendencia de recuperación con un 34%, y las pequeñas (menos de 500), sólo un 7%.

El estudio muestra además que los viajes de trabajo más frecuentes se realizan de forma individual. Los apartamentos de una sola habitación son los más demandados: representan el 76,9% del total mientras que los de dos, apenas son un 13,6% y los pisos con 3 habitaciones representan tan solo el 5,4% del total.

Además, el perfil promedio del viajero revela que el 77% de las personas viajan solas.

Destinos principales

En relación a los destinos a los que más se viaja, por provincias, Madrid es la más visitada con un 13.2%, seguida de Valencia, con un 10%, por delante de Barcelona, con el 8.2% de las solicitudes, (una tercera posición en el ranking, que el estudio atribuye a la elevada presencia de empresas con sede en Cataluña en la muestra). Sin embargo, si se hace este análisis por ciudades, aunque Madrid siga a la cabeza con un 12,3%, Barcelona supera a Valencia con un 6,1% y un 5,9%, respectivamente.

En cuanto a destinos internacionales, destacan Francia, 17.2%, y Portugal (14.4%). A pesar del efecto Brexit, el Reino Unido es tercero, con un 13%, seguido de Alemania, con un 11,6%, y, en quinto lugar, Países Bajos (6.3%). Estados Unidos por su parte se sitúa octavo y único país americano entre los diez primeros destinos. El podio por ciudades lo componen LisboaJersey (Reino Unido) y París.

A pesar del positivo avance de esta actividad, las peticiones nacionales superan con creces a las internacionales, ya que suponen casi un 80%.

Para Marc Vilar, CEO de Apartool, está claro que «el alquiler temporal corporativo de apartamentos, más que una tendencia temporal es ya una estrategia corporativa que mueve palancas fundamentales para las compañías: desde el punto de vista financiero, pasando por un nuevo cromosoma que mejora el ADN cultural; su planificación y uso refuerza una apuesta por la sostenibilidad y la responsabilidad».