La restauración española ha mantenido su rendimiento en verano, en un contexto de inflación y contención del gasto por parte de un consumidor que opta por experiencias más asequibles. El tardeo y el brunch se erigen como los nuevos momentos de consumo, señala un estudio de Delectatech.
El estudio ‘Resultados de la Restauración en Verano 2025′ de Delectatech, basado en más de 260.000 establecimientos hosteleros en España. refleja un verano marcado por la afluencia turística, una inflación persistente, una incertidumbre del consumidor en alza y un consumo más prudente, selectivo y polarizado.

La ocupación de los establecimientos se mantuvo estable (-0,6% frente a 2024); el ticket medio creció un 2,2% (muy por debajo de la inflación en hostelería del +4,3%) y la satisfacción del comensal descendió un 1,1%, mostrando un cliente más exigente y con menor tolerancia a la subida de precios.
Diferencias en el gasto
El comportamiento varía según origen del comensal. El turista internacional ha contenido menos el gasto, con un aumento del +3,3% en el ticket medio frente al +2,0% del consumidor nacional. Asimismo, la satisfacción del visitante extranjero cayó la mitad que la del nacional, lo que muestra una mayor resiliencia a la inflación.
Los establecimientos asequibles resisten
En cuanto a tipología de establecimientos, los bares y cafeterías con un gasto por comensal inferior a 15€ han logrado mantener su ocupación y ajustar precios en línea con la inflación, aunque han sido los más afectados por la caída en satisfacción.
Por contra, los restaurantes de casual y fine dining (con un ticket entre30–60€) son los que más han perdido en ocupación, pero han conseguido mantener estables los niveles de satisfacción, aun con subidas de precios por debajo del IPC.
La restauración, mejor en costa y el norte
El informe señala también que las zonas costeras e insulares han vuelto a liderar los niveles de ocupación y satisfacción del comensal, consolidándose como principales motores de la restauración en temporada alta. Sin embargo, en Baleares se ha registrado la mayor caída de ocupación respecto al año anterior, atribuida principalmente al incremento de precios.
En cuanto al ticket medio, la situación se mantiene estable: las cifras más elevadas corresponden de nuevo al norte del país y a Baleares, territorios donde el gasto por comensal sigue siendo el más alto del conjunto nacional.
Tardeo y brunch, en auge
Durante el verano de 2025 han emergido con fuerza nuevos momentos de consumo que reflejan la búsqueda del comensal por seguir socializando fuera del hogar, pero con un gasto más contenido. Entre ellos destacan el tardeo o afterwork y el brunch.
El tardeo ha incrementado su relevancia on-line un +38% respecto al verano de 2024 y un +60% desde 2023, mientas que el brunch ha crecido un +27% y un +40% frente al verano de 2023, ampliando la oferta sin desplazar al desayuno tradicional, que también registra un ligero aumento del +6%.
Estos momentos de consumo arrastran consigo ofertas gastronómicas que ganan protagonismo. En desayunos y brunches destacan el matcha latte (+195%), los huevos benedictinos (+47%) o el aguacate (+25%). En el tardeo, bebidas como el spritz (+47%) marcan tendencia.

El fast food gana al fine dining
El análisis de la relevancia on-line de distintas ofertas gastronómicas revela un traslado del interés hacia productos de menor ticket medio, en línea con el comportamiento más prudente del consumidor. Las categorías vinculadas al fast food y fast dining (pizzas, burgers o buffets de sushi), los desayunos, el brunch y el tardeo han experimentado los mayores incrementos de popularidad.
Entre los productos concretos con mayor crecimiento destacan el pistacho, el matcha, la kombucha y el iced latte.
En contraste, pierden relevancia las categorías tradicionales de mayor coste, como carnes premium, pescados, tapas, vinos y cerveza, lo que confirma un giro del consumo hacia alternativas más asequibles y diversificadas frente al casual y fine dining.

La hostelería se adapta a un consumidor más exigente
Esta radiografía del sector fue presentada ayer en un acto en el que han intervenido Xavier Mallol, CEO de Delectatech, Patricia Fernández de Arroyabe, miembro del consejo asesor del FoodService European Summit, think tank europeo del sector, y José Antonio Latre Ballarín, consejero y advisor de empresas industriales y de gran consumo.
Según explicó Jose Antonio Latre Ballarín, consejero y consultorde empresas industriales y de gran consumo, en la presentación de este estudio de Delectatech, «un cambio estructural que va suceder en la hostelería es que pasará de ser un sector donde la gente tiene un punto de venta a que emerjan cada vez más pequeñas cadenas. […] Como inversor, yo invertiría en fast food o en alta gastronomía premium. La clase media es la que está siendo comprimida”.
Por suparte Xavier Mallol, CEO de Delectatech, señala que «estamos en un sector horeca que debe seguir evolucionado. Hay muchos retos: el personal, el “mestizaje” gastronómico, la nueva competencia… […] Los cambios no tienen por qué ser malos, lo que es malo es ser el último en darte cuenta. Y la mejor medicina son los datos y la información”.