La que es la tercera cadena de pizzas más grande del mundo ha abierto en sus dos primeros restaurantes en Barcelona y acaba de inaugurar un nuevo local en Madrid, impulsando así su expansión por España.

Llegaba a España en diciembre de 2019 con su modelo Hot-N-Ready: pizzas recién hechas y listas para llevar, sin espera ni pedido previo. Tras asentarse en Madrid, ahora la cadena norteamericana Little Caesars Pizza desembarca en Barcelona.

«Ha sido increíble ver cómo ha crecido hasta el momento Little Caesars en Madrid y estamos muy emocionados con la apertura de nuestras primeras tiendas en Barcelona», señala Andrés de Robina, vicepresidente Internacional de Little Caesar Enterprises, Inc. «Barcelona es un mercado muy importante para Little Caesars, ya que nos permite continuar nuestra expansión en España, donde el sector de restaurantes de servicio rápido tiene una de las tasas de crecimiento más altas de la región. Estamos encantados de trabajar con nuestra franquicia local para llevar Little Caesars a las familias barcelonesas».

El franquiciado de Barcelona es Emilio Chávez, CEO de Interpizzaco, que se manifiesta «muy emocionado de abrir nuestras puertas en Barcelona, donde crear cientos de empleos en los próximos años«. Valora especialmente el concepto de Little Caesars, HotT-N-Ready, como «un modelo que ofrece a los clientes pizzas de gran sabor a un precio asequible. Ahora más que nunca ofrecer a consumidores una opción de comida segura y satisfactoria para sus familias»

Así, la enseña ofrece en sus nuevos locales de Barcelona varias pizzas grandes (36 cm de diámetro) Hot-N-Ready a partir de sólo 6€

En plena expansión

Además, Little Caesars Pizza acaba de aterrizar en el centro comercial Gran Víaa de Hortaleza, en Madrid, de la mano de Fresh Food Operators, con lo que alcanza cinco locales en Madrid y dos en Barcelona.

La cadena opera ya en 27 países y pretende continuar creciendo en todo el mundo, por lo que busca activamente franquiciados. En 2022 llegará a Rusia, Portugal, Ecuador y Reino Unido.

Little Caesars Pizza ofrece a los clientes la opción fácil y rápida de detenerse y escoger entre una selección de pizzas recién hechas, sin necesidad de esperar ni pedir por adelantado, con lo que no hay colas ni esperas en sus locales. Sus precios asequibles también influyen en su éxito internacional. Más información sobre la franquicia aquí.